Cada día hay más personas interesadas en
las bicicletas eléctricas porque aumenta la concienciación medioambiental y por
la salud y la forma física. Además, cuando saben que incluso les puede suponer
un ahorro respecto al transporte urbano habitual y muy particularmente respecto
al uso del coche, el interés se hace más evidente.
La fórmula más económica para
introducirse en el mundo de las bicicletas eléctricas es la motorización de una
bicicleta ordinaria, para lo cual está muy indicado que compremos un kit con
todos los elementos necesarios:
-Motor de buje ya radiado en una llanta
especial.
-Controlador electrónico.
-Batería de litio especial para este
uso, con sistema de protección BMS.
-Display y selector del nivel de
asistencia.
-Sensor de pedaleo.
El precio de estos kits empieza en unos
550 – 600 EUR para baterías con capacidades interesantes y elementos de calidad
también aceptable.
De este coste total, la batería se lleva
practicamente la mitad cuando no más, pues es el principal ingrediente del
cóctel y de su calidad y prestaciones dependerán más que de ningún otro
elemento, nuestro grado de satisfacción futuro.
A muchas personas les puede parecer caro
y tendrán sus razones, pero si lo comparamos, por ejemplo, con lo que cuestan
los componentes de calidad de las bicicletas no creo que sea tan caro. Tampoco
lo es en absoluto si lo que vamos a hacer es dejar el coche en casa muchos días
para ir al trabajo, por ejemplo, pues en tal caso, bien al contrario, se trata
de una inversión que muy pronto nos dará beneficios económicos además de
medioambientales y de forma física.
Aun así, yo creo que queda margen para
que las baterías bajen de precio o mejoren prestaciones, es decir, que comprar
una batería básica para el día a día sea cada vez más barato, con independencia
de que baterías cada vez con mayores prestaciones mantengan precios elevados.
En definitiva, el desembolso que hay que
hacer merece la pena y será recompensado con creces, eso sí, es preciso cuidar
muy bien la inversión, todos los componentes y especialmente la batería, pues
de lo contrario acortaremos su vida útil y su fiabilidad, para lo cual es
preciso que el usuario se forme mínimamente en este tipo de tecnologías y se
deje aconsejar por los expertos desde el momento de si introducción en este
mundo tan fascinante.
Saludos.
La energía más limpia es la que no se consume.