Este proyecto de motorización se ha realizado sobre una Cube de carbono con ruedas de 27,5´´ también de carbono. Por ello es una bicicleta muy ligera y dotada con componentes de calidad, por lo que la electrificación ha de diseñarse y realizarse cuidadosamente, no desmereciendo respecto a calidad y montaje.
Hemos optado por un motor de 250W de buje trasero más
pequeño que los habituales, por lo que casi no se ve, lo cual nos garantiza
máxima integración y ligereza.
Para la batería, Antonio, el propietario, ha preferido que
la situemos en una bolsa tras el sillín, que además le servirá para guardar
herramientas y otras cosas. La he construido a partir de celdas Samsung de
3500mAh, con un total de 17,5Ah, por lo que la autonomía no debiera ser
inferior a los 100Km siempre que se pedalee razonablemente.
El controlador es de 15ª máximos por lo que el motor podrá
llegar a darnos hasta 600W, lo cual debe hacerse solo puntualmente y durante
cortos intervalos de tiempo que yo recomiendo que no superen el minuto, pues no
hay que olvidar que el motor es de 250W, y es en la franja de los 200 -300W
donde le deberíamos exigir su trabajo continuo. Ello ayudará a que no se
sobrecaliente, ni él ni el controlador, ni la batería.
El display es el LCD6 completísimo, con seis niveles de
asistencia incluyendo el cero y dotado de puerto USB para cargar el móvil u
otros dispositivos electrónicos.
Al diseñar la batería hemos previsto conexiones de níquel
entre las celdas en cascada, es decir, teniendo en cuenta en qué puntos del
conjunto las intensidades son más altas y doblando y triplicando en ellos las
tiras de níquel de modo que nunca haya problemas de sobreintensidades ni
siquiera si se instalase en un motor de 500W o más. Además la hemos diseñado de
modo que se aproveche al máximo el espacio de la bolsa para que quede hueco
para alguna cosilla que se quiera llevar en ruta.
Como en otras ocasiones el problema mayor ha sido la
instalación del sensor de pedaleo, pues este cuadro de carbono lleva pedalier
press fit y al gran tamaño de la zona inferior del cuadro hay que añadir que
las bielas Shimano XT van literalmente pegadas al cuadro, no dejando hueco
alguno para nada.
Tras analizar y probar varias posibles soluciones, he optado
por adaptar un aro con los imanes sobre una pieza fabricada de aluminio y
adaptada y remachada a la biela izquierda, mientras que el sensor lo he
colocado con una pletina de acero inoxidable fijada a la base del cuadro
mediante fibra de carbono. Un trabajo muy laborioso, como he comentado, pero
que ha dado un buen resultado.
En las pruebas realizadas por el propietario, ha realizado
150Km sin recargar, combinando camino y asfalto y además, según me ha comentado, en la primera
salida rodó por carretera junto a una grupeta de ciclistas de carretera que
conocía, de gran nivel, en el nivel 5 durante más de una hora, es decir,
exigiendo de motor, controlador y batería más de 500W continuados.
Aunque yo desancosejo ese uso y de hecho me sorprende que no
haya dado ningún problema, da una idea de la calidad de los materiales y del
montaje.
En definitiva, ha quedado una bicicleta eléctrica muy ligera, bien integrada y que nos permitirá realizar miles de Km .... siempre que controlemos un poco el dedo de la asistencia y no la llevemos a máxima potencia tanto tiempo, claro.
Saludos.
La energía más limpia es la que no se consume.